Entre los muchos juguetes que vamos a poder ver en el Mobile World Congress 2014 que se va a celebrar en Barcelona entre el 24 y el 27 de febrero está este LG G2. Pese a que este dispositivo 4G no se va a presentar con motivo del conocido evento sobre movilidad, va a ser uno de los actores principales de esta obra.

El último móvil que LG ha lanzado en nuestro país abre el camino a toda una nueva generación de dispositivos que destacan por la original situación de los botones de control: en la parte trasera. Seguramente, mientras lees esto te estás preguntando que no deja de ser una frivolidad. Y honestamente, lo mismo pensaba un servidor. Pero eso fue antes de poder probarlo. En las últimas semanas de intensivo uso del terminal uno no puede más que sorprenderse por lo práctico que es tener los controles del teléfono en la parte trasera del mismo.

Y si no piensa una cosa, o mejor aún, coge tu teléfono. Venga, cógelo. Póntelo en el oído, como si estuvieras llamando por teléfono. ¿Dónde has puesto el dedo índice? Efectivamente, tu dedo índice está en la parte trasera del teléfono. Está justo donde LG ha puesto los botones de control de su G2. Y os aseguro que funciona de maravilla. Pero no solo cuando estás llamando. En el uso diario, el botón de encendido del teléfono es mucho más práctico de lo que uno se pueda imaginar. Flanqueado en los bordes superior e inferior por dos botones más, que te permiten interactuar con aplicaciones, la cámara o el navegador, esta nueva forma de controlar diversas acciones de nuestro smartphone suponen un nuevo –y muy agradable– concepto de telefonía.

Otra de las cosas más destacadas de este nuevo terminal de LG es la duración de la batería. Sin llegar a ser la alegría de la huerta –honestamente, es el gran problema que padecen todos los smartphones del mercado– lo que sí nota uno es que dura más que en otros teléfonos. No, si haces un uso intensivo del teléfono la batería no te va a durar todo el día. En este tampoco. Pero se quedará a las puertas. Y si racionalizas un poco ese intensivo uso, te aseguro que llegarás por la noche a casa con algo de carga en el teléfono, lo cual es todo un logro teniendo en cuenta cómo está el tema de las baterías móviles.

El teléfono es rápido, potente, y sería complicado que le echaras en falta más agilidad. Su ergonomía es muy buena, y tenerlo en tus manos es toda una experiencia. Su gran pantalla de 5,2 pulgadas es de gran calidad y de un tamaño por encima de la media del sector, aunque sin llegar a convertir el móvil en un dispositivo pesado ni torpe.

En definitiva, un móvil muy recomendable, posiblemente uno de los mejores que hay ahora mismo en el mercado, y que puede competir –y superar en algunos casos– a lo más granado de la telefonía mundial. ¿El precio? Rebuscando por ahí se puede encontrar por poco más de 400 €, lo que hacen de este G2 uno de los smartphones de gama alta más apetecibles que hay.

Y para los que queráis saber todos los entresijos técnicos del cacharrito, aquí tenéis el enlace.

Veredicto: ¡QUIERO UNO!